Sindicales | 26 jun 2024
Ley Bases
Héctor Amichetti sobre la Ley Bases: "Avanza enormemente sobre la protección laboral"
El secretario General de la Federación Gráfica y dirigente de la Corriente Federal de los Trabajadores, Héctor Amichetti, reflexionó sobre la eventual sanción que Diputados le daría a la Ley Bases y el impacto negativo sobre los derechos laborales, la producción e industria nacional.
"La Ley Bases avanza enormemente sobre la protección laboral", advirtió el dirigente de la Federación Gráfica Bonaerense y referente de la Corriente Federal de los Trabajadores, Héctor Amichetti, sobre la iniciativa del oficilismo que, este jueves 27, sancionaría la Cámara de Diputados -luego de haber pasado por el Senado, que introdujo modificaciones al proyecto que, previamente, la Cámara baja había girado con media sanción-.
De esta manera, el oficialismo más los legisladores dialoguistas avalarían la sanción de una norma que desde vastos sectores tildaron de "anticonstitucional", "mala" o incluso "regresiva" por la cantidad de reformas estructurales que plantea -la laboral, por caso- y el mecanismo de debate que la Libertad Avanza quiso imponer al intentar llevarse puesto el debate e intercambio parlamentario o al replicar prácticas acuerdistas de la casta que dice combatir.
"La Cámara de Diputados está a punto de sancionar definitivamente la Ley Bases, cuyo contenido implica un tremendo retroceso en materia laboral, ya que directamente avanza sobre la protección del trabajo con derechos", definió de entrada el dirigente Héctor Amichetti al referirse al Capítulo que, dentro de la Ley Bases, plantea una "regresiva reforma laboral" en cuanto a la extensión del período de prueba a un año; la legalización de los despidos por discriminación; la promoción del empleo informal al eliminar las multas para los empleadores que no tenga registrados a sus empleados; la creación de la figura "Colaborador" para aquel trabajador o trabajadora que se desempeña en establecimientos con hasta tres empleados o empleadas; más la sustitución de las indemnizaciones por un fondo de cese laboral; la penalización de la protesta laboral, entre otros puntos. "A lo que ellos llaman bloqueo o impedimento de trabajo, nosotros lo llamamos medida de fuerza o paro, de acuerdo al derecho constitucional a la huelga", explicó Amichetti y subrayó: "La fuerza de trabajo entra en conflicto porque no se respeta algún derecho o algún reclamo del trabajador no es atendido oportunamente por la patronal".
"Es evidente que se trata de desestructurar, o por lo menos dar un paso muy importante, sobre todo lo que es el derecho laboral, la protección del trabajador que cuando tiene una relación de dependencia laboral tiene un salario, un aguinaldo, un sistema de vacaciones y condiciones establecidas a través de los Convenios Colectivos de Trabajo. Es realmente un retroceso enorme", definió el dirigente.
En sintonía, el dirigente apuntó al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones -RIGI- que plantea beneficios tributarios a inversores extranjeros por 30 años y pone en jaque el desarrollo de la industria nacional, la explotación de los recursos naturales y la creación de empleo local.
"La Reforma Laboral no puede verse separada de lo que implican otras medidas como, por ejemplo, el RIGI y la delegación de facultades al Ejecutivo", sostuvo y precisó: "El RIGI permite a las grandes inversiones entrar con una facilidad enorme en cuanto a exenciones impositivas de todo tipo y, a su vez, permite que proveedores, que podrian ser nacionales, de la produccion y el trabajo argentino, sean también importados, con lo cual, definitivamente, nos estan demostrando que ponen el acento en una economía reprimarizada porque está orientada a esas inversiones, que a su vez abren indiscriminadamente todo tipo de importación, desplazando la producción nacional".
Panorama productivo/laboral que se agrava si se mira en paralelo la actual película de recesión y desempleo creciente -según el INDEC, la tasa de desocupación del primer trimestre de 2024 fue de 7.7 por ciento, entre otros indicadores productivos poco alentadores, como la baja del uso de la capacidad instalada de la industria-. "Estamos notando en la industria el efecto de la recesión, la caída del consumo, la apertura de las importaciones y la pérdida de puestos de trabajo. Este modelo económico lleva a una segunda vuelta de tuerca en lo que es la pérdida de derechos laborales o, por lo menos, lo que es la flexibilización de hecho, la precarización, que se va a dar producto del empobrecimiento de la economía nacional", advirtió.
En cuanto a las facultades delegadas -que el Presidente tome decisiones sobre ciertos temas sin pasar por el Congreso- el dirigente Gráfico reparó sobre las implicancias en la investigación, el desarrollo, la producción y el trabajo. "Como Milei ha dicho al autodefinirse como ´un topo dentro de un sistema cuyo enemigo es el Estado´, tomará las medidas que ya sabemos para debilitar el Estado en cuestiones centrales como puede ser la planificación de la economía, controles y demás, lo que implica un efecto muy directo sobre la actividad productiva, la investigación, el desarrollo teconológico-científico y, por supuesto, es también una desprotección total de la ciudadanía en general y de los derechos laborales en particular", dijo.
Y cerró: "Bajo todo punto de vista es una Ley que apuntala un modelo de país en el que el trabajo es absolutamente secundario, un costo que debe ser lo más bajo posible para los sectores del capital, que son los únicos priorizados".