

"Argentina con Cristina" convocó a organizaciones sociales, políticas, sindicales y autoconvocados de todo el país que, en una demostración de fuerza, respaldaron a la exmandataria, tras la condena a seis años y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por la causa Vialidad.
La decisión judicial interpeló a diversos sectores, que se movilizaron en respaldo a la expresidenta, a la democracia y en rechazo al lawfare. Incluso, inicialmente, a la puerta de su casa en el barrio porteño de Constitución. También, motorizó la unidad del peronismo y de sendos sectores que, desde que se conoció la noticia, aceitaron canales de acercamiento, discusión -aunque sin definiciones por ahora-.
Inicialmente, la movilización iba a ser a Comodoro Py, pero dada la confirmación de la prisión domiciliaria, y en una demostración de poder en la calle, se realizó en Plaza de Mayo. Lo que emuló aquel 9 de diciembre de 2015, cuando Cristina Kirchner se despidió con una Plaza colmada. Una postal que el Gobierno de Javier Milei quiso evitar.
Finalmente, la jornada de manifestación cerró con las palabras de la expresidenta, quien envió un audio que resonó en la Plaza e inmediaciones. "Lo que más me gustó fue escucharlos cantar: ´Vamos a volver´", dijo y cosechó el aplauso unánime de los presentes, que la escuchaban con emoción pero, también, con la historia de vida que cada uno guarda de sus años de Gobierno.
"Vamos a volver argentinos y argentinas, lo vamos a volver a hacer una y mil veces como se ha hecho desde el fondo de la historia: Los pueblos, finalmente, siempre vuelven", completó.
A continuación, reproducimos sus palabras:
“Hola, ¿qué tal?¿Cómo están, queridos compatriotas, en esa maravillosa e histórica Plaza de mayo? Bueno, espero que muy bien.
"Yo aquí, en San José 1111, firme y tranquila. Eso sí, con prohibición de salir al balcón.Dios mío, qué cachivaches que son.
"Quiero agradecerles a todas y a todas las increíbles muestras de afecto y de cariño todos estos días acá en la puerta de mi casa y en distintos puntos del país. Gracias de corazón.
"Los he escuchado cantar consignas, cantar la marcha, cantar el himno nacional con mucha pasión. Pero quiero contarles que lo que más me gustó fue escucharlos cantar otra vamos a volver. No lo hacíamos desde hacía muchísimo tiempo, demasiado, tal vez.
"Y me gusta ese vamos a volver porque revela una voluntad, la de volver a tener un país donde los pibes puedan comer cuatro veces al día y en el colegio les den libros y computadoras. Que los laburantes lleguen a fin de mes y puedan ahorrar para comprarse un autito, una casita, un terrenito, algo que sea de ellos, conseguido con el esfuerzo de su trabajo. Bien peronista. Los jubilados tenían remedios. Dios mío.
"Ese país no fue ninguna utopía. No, no, no, no. Lo vivimos durante 12 años y medio y además lo dejamos desendeudado, como a las familias y a las empresas. Increíble lo que han hecho, como han destruido.
"Pero, así como aquello fue una realidad, yo les quiero decir que este modelo que ahora encarna Milley, que no es diferente a los de otrora, se cae. Y se cae no sólo porque es injusto e inequitativo, no, no, no. No solamente por eso, sino fundamentalmente porque es insostenible en términos económicos. Tiene vencimiento, como el yogur.
"Y no es nuevo, ya lo vimos con Martínez de Hoz en el 76 y con Cavallo en los 90. Porque me pregunto: ¿cómo se sostiene un modelo económico donde la gente tiene que tarjetear la comida del día a día y arriba después no puede pagar la tarjeta?¿Cómo subsiste un país donde es mucho mejor comprar comida, viajar, comprar ropa afuera porque es más barata de lo que está aquí adentro del país?
"Y mientras esto sucede, el ministro de Economía, el impresentable de Caputo, alquila dólares. Alquila dólares para simular que tiene reserva. ¿Realmente hay alguien que pueda pensar seria y sensatamente que esto es sostenible? Mi Dios. Más chanta no se consigue.
"Y lo peor es que el verdadero poder económico sabe que este modelo no tiene futuro. Sabe que se cae. Y por eso estoy presa.
"Pero hay algo que deben entender todos y todas, incluso ellos, los del poder económico concentrado: pueden encerrarme a mí, pero no van a poder encerrar a todo el pueblo argentino. Los que están asustados no somos nosotros, son ellos.
"¿Hace exactamente una semana le pregunté públicamente, lo dije, por qué si dicen que yo estaba acabada, que nadie me quería, por qué no me dejaban competir? Bueno, ya respondieron. Y la respuesta es esta: yo aquí, presa en San José 1111, sin siquiera poder salir al balcón. Menos mal que no tengo macetas con plantas, porque ni siquiera las podría regar. Qué sé yo. Gente ridícula si las hay.
"¿Y saben por qué no me dejan competir? Porque saben que pierden.
"Por eso en esta etapa es necesario organizarse para clarificar, repito, organizarse para clarificar cuál es el verdadero problema que tiene nuestro país, que no es más ni menos que un modelo económico en el que se enriquecen unos pocos y el resto la ñata contra el vidrio.
"Y esto está sostenido por un andamiaje judicial que, al mismo tiempo que mantiene vigente adefecios como el decreto 70, que directamente modificó la Constitución, me mete presa a mí. Simple y sencillo. Fácil de entender, poder económico más partido judicial y el resto que se joda.
"Hoy es el momento de demostrar que vamos a defender la democracia con las mismas herramientas con las que la construimos. Sin violencia, pero con coraje. Sin miedo, pero con absoluta claridad del momento histórico que estamos atravesando todos los argentinos. Con amor, lo vamos a hacer con mucho amor, como siempre. Con amor profundo por esta patria que tantísimas veces intentaron arrodillar y tantas veces supo levantarse una y otra vez.
"El pueblo argentino ya lo demostró mil veces que sabe ponerse de pie, que sabe resistir, que sabe organizarse, que sabe luchar y que si lo expulsan tambien sabe volver: volvió con Perón, volvió con Néstor.
"Yo no sé exactamente qué me depara el futuro inmediato. No tengo la bola de cristal, pero sí se algo: ya he pasado por casi todo en esta vida: viví una dictadura que desapareció a 30 mil argentinos y argentinas, viví múltiples intentos de saquear el país y dejar al pueblo sin derechos, viví el ejemplo y el enorme sacrificio de Néstor y todo lo que nos costó construir aquella década ganada, no solo en términos políticos sino personales y de familia. Viví tambien un intento de asesinato. La verdad es que no me ha faltado nada en estos años. Y he soportado este proceso judicial infame que se arrastra hace años y que llegó a su fin con la misma corrupción judicial con la que empezó.
"Bueno, queridos argentinos y argentinas, vamos a volver y además vamos a volver con más sabiduría, con mas unidad, con mas fuerza y desde donde me toque estar, desde la trinchera que sea, voy a seguir haciendo todo lo que esté a mi alcance para estar ahí junto a ustedes, como ustedes siempre han estado, también, junto a mí. Pero lo vamos a hacer porque tenemos algo que ellos jamás van a tener, ni van a poder comprar por más plata que tengan: Tenemos pueblo, tenemos memoria, tenemos historia y tenemos patria. Vamos a volver argentinos y argentinas, lo vamos a volver a hacer una y mil veces como se ha hecho desde el fondo de la historia: Los pueblos, finalmente, siempre vuelven".