

Con 125 votos opositores, la Cámara de Diputados dio media sanción a un proyecto de reforma a la Ley de Alquileres que, a pesar de estar vigente, no se cumple cabalmente. En contra votaron el oficialismo, la izquierda y los libertarios -que le aseguraron a Juntos por el Cambio, que impulsaba el debate, el quórum de 129 diputados presentes para sesionar-. Abstención del socialismo -que también dio quórum-
"Hoy se votó en Diputados un proyecto de reforma de la ley de alquileres. Montado en un show armado por Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza, se convocó a la sesión con la finalidad de discutir la modificación de una ley que no termina de aplicarse. El resultado: modificaciones que no ayudan, sino que empeoran la situación de los millones de inquilinos de nuestro país", expresó tras la votación la diputada Natalia Souto.
La iniciativa reduce el plazo de los contratos de alquileres de tres a dos años y establece que la actualización de los montos sea cada cuatro meses -hoy es anual- en base a un índice que se pacte entre las partes -actualmente se usan indicadores del IPC/RIPTE-.
En la calle, inquilinas e inquilinos expresaron su rechazo y preocupación por la avanzada. “Nada de lo que deba pactarse entre las partes va a beneficiar al inquilino. Los propietarios y las inmobiliarias siempre imponen sus condiciones, si no te gusta, que pase el que sigue”, dijeron.
En sintonía, la diputada manifestó: "Juntos por el Cambio se quiso abanderar de una discusión de la que nunca buscó una real solución. En concreto, se votó volver al plazo de contrato máximo de 2 años, la posibilidad de realizar ajustes desde los 4 meses, y establecer un índice de aumentos por acuerdo de las partes. No podemos pretender engañarnos suponiendo una irreal simetría entre partes. Ya lo vivimos durante años. Cuando se deja librado al acuerdo de partes, quien pone las condiciones es el propietario".
Finalmente, Souto apuntó al jefe de la bancada libertaria: "Javier Milei, por su lado, se retiró del recinto cuando no se incorporó el proyecto para derogar la ley vigente, evidenciando su intención de dejar librados a su suerte a los que alquilan, sin la protección del Estado” -Milei está en contra de la regulación del mercado-.
“La Argentina sufre un serio problema de acceso a la vivienda. La cantidad creciente de personas que alquilan sumada a la baja oferta de alquileres hacen de la situación una de las mayores preocupaciones de hoy en día. Si bien tenemos una ley de alquileres vigente, en la gran mayoría de los casos no se aplica, lo que deriva en acuerdos por fuera de esta", cerró la legisladora.
Así, la iniciativa plantea una regresión en materia de regulación sobre los alquileres, dejando a las y los inquilinos en condiciones de vulnerabilidad. Será girada al Senado para su tratamiento.